Mantén tu HTML limpio y ordenado:
Usa sangrías adecuadas y comentarios para organizar tu código. Esto facilitará la lectura y la colaboración con otros desarrolladores.
Haz que tu sitio sea receptivo (responsive):
Diseña tu sitio web de manera que se adapte a diferentes dispositivos y tamaños de pantalla. Utiliza media queries en CSS para crear diseños responsivos.
Utiliza un sistema de control de versiones:
Emplea herramientas como Git para mantener un historial de cambios en tu código y facilitar la colaboración con otros desarrolladores.
Aprende y practica CSS Grid y Flexbox:
Estas tecnologías te permiten crear diseños más complejos y flexibles de manera más sencilla que con métodos tradicionales de posicionamiento en CSS.
Mantente actualizado:
El desarrollo web está en constante evolución. Mantente al día con las últimas tendencias, estándares y mejores prácticas en HTML y CSS.
Experimenta y diviértete:
No tengas miedo de probar cosas nuevas y experimentar con diferentes técnicas y herramientas. El desarrollo web es un campo creativo, ¡así que diviértete mientras aprendes y creas cosas increíbles!
Optimiza el rendimiento:
Minimiza el uso de imágenes pesadas y archivos CSS/JavaScript innecesariamente grandes. Comprime tus recursos y utiliza herramientas como PageSpeed Insights para identificar áreas de mejora en el rendimiento de tu sitio web.